Syringa vulgaris – Flores Losan
Syringa vulgaris, lilo o lila común, así se conoce a este precioso arbusto de hoja caduca y flores pequeñas y acampanadas, de color lila, blanco e incluso rosadas, muy apreciadas por su agradable olor. Puede llegar a medir hasta 7 metros de alto, aunque lo normal es que se quede entre 2 y 4 metros. En cuanto a la anchura, los ejemplares adultos pueden alcanzar los 2 e incluso 3 metros, por lo que si plantamos varios deberemos tener en cuenta estas medidas.
Es un arbusto muy apropiado para nuestro entorno, pues no sólo es muy resistente al frío, sino que además, éste favorecerá una buena floración. Puede plantarse al sol, semisombra o en una sombra luminosa, y en suelos fértiles ligeramente alcalinos. Puede resistir algo de sequía, pero no mucho, sobre todo si está recién plantado; entonces habrá que regarlo con mayor frecuencia, sobre todo si el tiempo es caluroso.
Muy importante es para la Syringa vulgaris el tema de la poda. Las flores nacen de las yemas de las ramas del año anterior, y por tanto no se puede podar en invierno, pues eliminaremos estas yemas y no florecerá. En primavera, una vez pasada la floración, eliminaremos las flores secas y ramas muertas, y despuntamos las ramas del año dejando 2 o 3 yemas laterales contadas desde su intersección. De estas yemas nacerán brotes que al año siguiente darán flores.